domingo, 7 de noviembre de 2010

¿Qué es la medicina? - ¿Qué es ser médico?



¿QUÉ ES LA MEDICINA?

En esta primera parte del ensayo desarrollaremos la pregunta del enunciado expresado y la siguiente hipótesis: cuando un país tercermundista se desarrolla la medicina tradicional aumenta su cobertura, por el contrario la medicina alternativa empieza a disminuir.

Según el diccionario de la Real Academia Española (RAE), se define medicina como: “Ciencia y arte de precaver y curar las enfermedades del cuerpo humano”.

Normalmente tomamos en cuenta solo la primera parte de lo recién expresado, olvidando una parte muy importante. Porque, a pesar, de que la medicina se vale de herramientas y métodos que nos permite proporcionar al paciente una cura o muchas veces un progreso en la calidad de vida, uno de sus roles fundamentales es evitar que los pacientes, o en este caso, la población padezca de la enfermedad.  Dentro de la medicina existe una especialidad médica preventiva, que está estrechamente relacionada con la medicina curativa. Esta especialidad médica es la encargada de prevenir enfermedades mediante un conjunto de acciones y consejos médicos. En este plan preventivo, se encuentran las campañas de vacunación de las enfermedades invernales a los grupos de alto riesgo, promoción de la salud como educación sexual, distribución de medicamentos, educación en ámbitos como la higiene, entre otros.

Entonces la medicina procura mantener y prolongar la salud del ser humano. La Organización Mundial de la Salud (OMS), define salud como: “un estado de bienestar tanto físico como psicológico”. Antiguamente se priorizaba el bienestar físico sobre el mental, donde este último era menospreciado y muchas veces era, incluso, comprometido por resguardar el físico. En la actualidad se debe tratar a ambos paralelamente y como un entero, considerando que cuando se carece de uno ya no nos encontramos en un estado de salud pleno y sólo cuando estos dos se complementan nos van a brindar la prosperidad  y bienestar que conlleva tener buena salud.

En la actualidad, hablamos de medicina para referirnos a la parte convencional y tradicional de esta, es decir, personas de la salud que han estudiado una carrera universitaria o técnica y que tienen los conocimientos necesarios para aplicarla. Pero según los conceptos recientemente aclarados podríamos deducir que la medicina es mucho más amplia de lo que vivimos en el día a día. Por ejemplo, lo que conocemos como medicina alternativa, ya que esta no tiene un respaldo tan empírico como la medicina tradicional y por eso a veces no es tan valorada. Pero a pesar de eso, encuentra curas para sus pacientes y los ayuda a mejorar tanto en su parte física como psicológica, por lo tanto podría ser considerada según lo expuesto como medicina.

Cada día estos dos tipos de medicina empiezan a mezclarse y a trabajar juntas, esto se conoce como medicina complementaria. En este tipo de medicina, el paciente es sometido, como normalmente, a la medicina convencional y en algunos casos se le puedo aplicar paralelamente la medicina alternativa, usualmente como un agente de relajación o como una anestesia natural y no como algo curativo en sí. Esto ocurre no porque la medicina alternativa no tenga “un poder” curativo sino porque, la mayoría de la gente, tiene la mentalidad de que la medicina alternativa no es tan efectiva como la convencional o simplemente no “creen” en ella. Por esa misma razón, debe existir una aprobación previa del paciente, porque a pesar de que ya conocemos más sobre este tipo de medicina, todavía no es aceptada por toda la gente como una medicina curativa con un respaldo científico, sino que más como una charlatanería.

Por otro lado existen costumbres muy antiguas que han pasado de generación en generación como “trucos” que son practicados habitualmente para sanar a la gente, pero no nos damos cuenta de que en la realidad podrían ser parte de la medicina alternativa.

Como ejemplo de esta tradición en Chile, podemos nombrar el consumo de hierbas medicinales que tienen una gran cantidad de adeptos, donde encontramos la manzanilla para el dolor de estómago, bailahuén para el hígado, melisa como mecanismo de relajación, entre muchas otras hierbas.

Normalmente estas costumbres se van perdiendo con el tiempo o sencillamente se complementan con administración de remedios de la medicina convencional, pasando la medicina alternativa a segundo plano y sólo como un complemento de la tradicional. Porque en muy pocos casos alguien se trata únicamente con medicina alternativa.

Lo descrito anteriormente se basa en relación a lo que se vive  en países latinoamericanos como Chile, ya que, por el contrario, la medicina alternativa es inmensamente popular en regiones orientales como China, Nepal y Vietnam; donde este tipo de sanación es altamente explorada y empleada.

De esto podemos desprender que la medicina tradicional prevalece ante la alternativa, a pesar de que esta se practica regularmente incluso sin darnos cuenta. Esto apoya la hipótesis anteriormente planteada.

Lamentablemente, tanto la medicina alternativa como la medicina tradicional no llegan a todos los rincones y a manos de todas las personas. Existiendo una gran carencia en la calidad de la medicina en lugares más recónditos o pueblos que no tienen la tecnología suficiente como para complacer las necesidades de los enfermos. También en estos lugares la cantidad de médicos especialistas es muy reducida y no dan abasto para todas las personas que necesitan de su ayuda, teniendo muchas veces grandes listas de espera a gente que requiere de una mayor calidad de atención e inmediata.

Pero la geografía no es el único factor que afecta la calidad de la medicina, también existe un factor socioeconómico, donde sólo una pequeña parte de la población puede pagar médicos especialistas de la mejor calidad. Esto no significa que en todos casos los médicos de hospitales sean mediocres, sino que muchas veces no tienen acceso a la tecnología requerida para atender a sus pacientes o simplemente es tanta la demanda de pacientes que llegan a rebosar la capacidad de hospitales, dejando a los pocos médicos que atienden sin tiempo para brindar una ayuda de calidad.

Es por eso que muchas veces la gente menos beneficiada, en términos de salud, acepta este tipo de medicina opcional o alternativa como único método de sanación o al menos provisorio hasta que pueda acceder a uno de mayor calidad. Por esa razón al haber un crecimiento tecnológico y económico del país, se difunde mayormente la atención de la salud, tratando de prevalecer una medicina curativa convencional y no alternativa, ya que en muchos casos esta es de menor calidad.

Ahora Chile es un país más desarrollado que en décadas anteriores y esto ha producido un aumento de la salud en la cobertura nacional, a pesar de que esa medicina no siempre sea de la mejor calidad, esta se encuentra a lo largo y ancho de todo nuestro país, no como anteriormente. Concretamente esto ha producido una disminución en la mortalidad infantil quedando en el 4° lugar de América, se ha mejorado la  atención médica en el parto (casi todos son en hospitales o clínicas), se ha tratado la desnutrición, se ha prolongado la esperanza de vida, etc.

¿QUÉ ES SER MÉDICO?

En esta segunda parte del ensayo responderemos la pregunta formulada y desarrollaremos la siguiente hipótesis: el médico, de la medicina tanto actual como futura, cada vez estudia más sobre una materia y se va especializando en un área,  tanto así, que se van perdiendo los médicos de cabecera o general (de calidad).

Un médico es un profesional de la salud que practica a cabalidad lo que trata la medicina, es decir,  evitar que la población se enferme y curar en caso de que ocurra lo contrario.

El médico debe ser capaz de diagnosticar las enfermedades y tratarlas, de manera que el paciente enfermo pueda sanarse, aliviar su molestia o mejorar su calidad de vida en caso de que la enfermedad no pueda ser sanada. Esto se debe hacer tanto de una manera funcional física como psicológica, ya que una gran parte del trabajo que tienen los médicos es colaborar desde una perspectiva social. Tratando siempre de que el paciente pueda ser aceptado por la sociedad y se pueda integrar normalmente en esta, sin quedar marginado.

Antiguamente si alguien estaba enfermo o necesitaba de atención médica por algún trauma o dolencia en general, se dirigía a un doctor de cabecera el cual era capaz de diagnosticar y tratar eficazmente al paciente. Esto se cumplía casi siempre, con excepción de enfermedades de elevada complejidad o  en el caso de que fuera una enfermedad no comúnmente conocida.

En la actualidad los médicos especialistas se preocupan de que en todos los casos la atención sea satisfactoria (incluso en los casos más complejos y extraños), para eso estudian muchos años, de manera que puedan especializarse en uno de los diferentes ámbitos que ofrece la medicina.

Llegan a ser tan especialistas en su área que muchas veces no tratan a pacientes si es que están fuera de su rango de especialidad y simplemente los transfieren. No porque pierdan conocimientos en esa área sino porque saben que recibirán mejor atención con el otro médico especialista. Por un lado, esto es beneficioso porque como paciente se tiene la opción de tratarse con un médico que es experto en esa área. Pero por otro lado, puede ser desfavorable porque no todos tienen los recursos para tratarse con varios médicos especialistas y muchas veces se quedan con la opinión del médico general que podría no ser la más correcta.

Otro punto perjudicial con respecto a la hipótesis, es que los médicos especialistas se encuentran en baja cantidad en lugares lejanos o menos desarrollados, lo que provoca que exista una calidad de la salud mucho menor a la que hay en las grandes ciudades. Esto se debe también a que muchas veces sólo hay médicos generales, que como es lógico, tienen mucho menos conocimiento que los médicos especialistas.

Hoy en día se cree que si el médico no tiene especialidad significa que no es muy bueno, porque actualmente las especialidades son muy reducidas y muy pocos médicos pueden optar a ellas.

Personalmente yo creo que todo médico debería poder optar a una especialidad médica abriendo mayor cantidad de cupos para poder estudiarlas. La medicina del futuro mira hacia una medicina más especializada en todo tipo de ámbito, de manera que se pueda tratar más eficazmente a la población. Pero no podemos concentrar todo ese conocimiento en una sola persona, por lo que es necesario que todo médico pueda especializarse para poder llegar más profundamente a los problemas de las personas y poder ayudarlas de mejor manera.

Creo que si las especialidades fueran más abiertas y difundidas, tendríamos una salud de mejor calidad, se podría ayudar donde no se ha llegado antes y se podría arreglar la mala práctica en los hospitales menos abastecidos por doctores, ya que, como había planteado anteriormente, muchas veces los hospitales son saturados y no son capaces de atender satisfactoriamente.

Las dos hipótesis propuestas en los temas expuestos, apuntan en una sola dirección: la calidad de la medicina en la actualidad y cuáles son sus desventajas y puntos débiles.

Con los puntos de vista recientemente expuestos nos podemos dar cuenta de las falencias que existían en la medicina contemporánea y como en Chile hemos podido avanzar inmensamente gracias a la amplia cobertura que la medicina tiene hoy en día. Esto ha permitido llegar a lugares de Chile, donde antes la medicina era de mucha menor calidad, gracias a los pocos miembros de la salud que habían y a la poca tecnología que ahí se encontraba. Hoy por hoy, nuestro país se ha ido desarrollando en ámbitos tanto tecnológicos como económicos lo que le ha permitido expandir la salud, “combatiendo” para mejorarla y llevar la medicina tradicional a todos los rincones de nuestro país.



BIBLIOGRAFÍA

1-    www.rae.es
2-    www.who.int (OMS)
3-    http://escuela.med.puc.cl

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